Trastornos hemorrágicos Causas y factores de riesgo
¿Cuáles son las causas de los trastornos hemorrágicos?
Los
u otras causas, como afecciones médicas o medicamentos, pueden causar trastornos hemorrágicos. En ocasiones, es posible que no se conozca la causa. Cualquier problema que afecte la función o la cantidad de los factores de coagulación o de las puede producir un trastorno hemorrágico.Al tratar de diagnosticar un trastorno hemorrágico, el médico considerará diferentes factores, como los síntomas, los factores de riesgo, los antecedentes médicos y familiares y diferentes pruebas. Una vez que se identificó el tipo del trastorno hemorrágico, el equipo médico desarrollará un plan de tratamiento.
Genética
Los trastornos hemorrágicos pueden estar causados por genes que se transmiten de padres a hijos. Los genes proporcionan las instrucciones sobre cómo se fabrica cada factor de coagulación. Si existe una
en el gen, el factor de coagulación posiblemente se produzca de manera incorrecta o no se produzca.

Otras causas
Las afecciones médicas, los procedimientos o los medicamentos pueden causar trastornos hemorrágicos. Algunas afecciones médicas y medicamentos que producen trastornos hemorrágicos hacen que el organismo produzca proteínas, llamadas anticuerpos o inhibidores, que pueden atacar los factores de la coagulación.
Otras afecciones médicas pueden hacer que el cuerpo deje de producir factores de coagulación o que se produzca una cantidad demasiado pequeña. Ciertos dispositivos o procedimientos médicos también pueden afectar los factores de coagulación, ya que el bombeo de sangre por esa zona puede afectar la cantidad de factores de coagulación.
¿Cuáles son los factores que aumentan el riesgo de tener trastornos hemorrágicos?
Puede tener un riesgo aumentado de desarrollar trastornos hemorrágicos según la edad, los antecedentes familiares y la
, la presencia de otras afecciones médicas y uso de medicamentos, y según el sexo.Edad
Los trastornos hemorrágicos pueden ocurrir a cualquier edad. Sin embargo, los recién nacidos tienen más probabilidades que los adultos de presentar sangrado por deficiencia de vitamina K. La hemofilia A adquirida es más frecuente entre personas añosas.
Antecedentes familiares y genética
Los trastornos hemorrágicos pueden afectar a varios miembros de la familia Si uno o ambos padres tiene la enfermedad, tiene un mayor riesgo de tener un trastorno hemorrágico.
Otras afecciones médicas
Determinadas enfermedades o afecciones médicas pueden aumentar el riesgo de un trastorno hemorrágico adquirido, como:
- Transfusiones de sangre
- Enfermedades intestinales o cirugía intestinal
- Cáncer
- Cardiopatías congénitas o adquiridas
- Hipotiroidismo
- Enfermedades inmunitarias, incluidas las enfermedades como la artritis reumatoide y el lupus
- Infecciones
- Hepatopatías
- Trastornos linfoproliferativos, como determinados tipos de leucemia
- Embarazo
- Sangrado posparto, que puede agotar los factores de coagulación del organismo demasiado rápido
- Afecciones cutáneas
- Traumatismos, o lesiones graves, en el cerebro o el cuerpo
Determinados tratamientos para afecciones médicas también pueden aumentar el riesgo, por ejemplo:
- Antibióticos
- Medicamentos diluyentes de la sangre, también llamados anticoagulantes, que se usan para ayudar a prevenir que se formen coágulos sanguíneos dentro de los vasos sanguíneos
- Dispositivos que aumentan el flujo de sangre, como los dispositivos de asistencia ventricular
- Interferón alfa, un medicamento para tratar determinados tipos de cáncer
- Cirugías, como las cirugías cardíacas (en inglés) que usan un equipo de bypass cardiopulmonar, que puede producir enfermedad de von Willebrand adquirida
Sexo
La hemofilia es mucho más frecuente en hombres que en mujeres Sin embargo, las mujeres tienen un mayor riesgo de sufrir trastornos hemorrágicos, como hemofilia adquirida, durante el embarazo y después del mismo.
¿Se pueden prevenir los trastornos hemorrágicos?
Los trastornos hemorrágicos hereditarios, como la hemofilia hereditaria o adquirida y la enfermedad de von Willebrand, no se pueden prevenir. Las parejas que planean tener hijos y saben que tienen riesgo de tener un hijo con un trastorno hemorrágico posiblemente deseen realizar una consulta con un asesor en genética. Un asesor en genética puede responder las preguntas sobre el riesgo.
Los recién nacidos tienen un mayor riesgo de tener sangrado por deficiencia de vitamina K. Para prevenir un trastorno hemorrágico causado por deficiencia de vitamina K, lo más probable es que se le administre una inyección de vitamina K al bebé inmediatamente después del nacimiento.