Anemia de células falciformes - Signos, síntomas y complicaciones - Signos, síntomas y complicaciones

Si una persona tiene anemia de células falciformes, la tiene desde el nacimiento. Pero la mayoría de los recién nacidos no tienen ningún problema a causa de la enfermedad hasta que tienen aproximadamente 5 o 6 meses de edad.

Los síntomas de la anemia de células falciformes pueden variar de persona a persona y cambiar con el tiempo. Con el tiempo, puede presentar síntomas según cómo la anemia de células falciformes afecte su salud.

Primeros signos y síntomas

Algunos de los primeros síntomas de la anemia de células falciformes pueden incluir los siguientes:

  • Color amarillento de la piel, o en el blanco de los ojos, conocido como ictericia, que se produce cuando una gran cantidad de glóbulos rojos sufre hemólisis .
  • Fatiga o irritabilidad por la anemia.
  • Hinchazón dolorosa de manos y pies, conocida como dactilitis.

Complicaciones

Las complicaciones de la anemia de células falciformes incluyen las siguientes:

  • Síndrome torácico agudo. La presencia de células falciformes en los vasos sanguíneos de los pulmones puede privarlos de oxígeno. Esto puede dañar el tejido pulmonar y causar dolor de pecho, fiebre y dificultad para respirar. El síndrome torácico agudo es una emergencia médica. 
  • Crisis de dolor agudo. También conocida como crisis de células falciformes o vasooclusiva, puede producirse sin previo aviso cuando las células falciformes bloquean la circulación sanguínea. Las personas describen este dolor como agudo, intenso o punzante. El dolor puede presentarse en casi cualquier parte del cuerpo y en más de un lugar a la vez. Las áreas comunes afectadas por el dolor son el abdomen, el pecho, la espalda baja o los brazos y las piernas. Se puede provocar una crisis por grandes altitudes, deshidratación, enfermedad, estrés o cambios de temperatura. A menudo, una persona no sabe qué desencadena la crisis.
  • Dolor crónico. El dolor crónico es común, pero puede ser difícil de describir, aunque generalmente es diferente del dolor de una crisis o del dolor provocado por daños en un órgano.
  • Retraso en el crecimiento y la pubertad. Los niños que padecen anemia de células falciformes pueden crecer y desarrollarse más lentamente que sus compañeros debido a la anemia. Alcanzarán una madurez sexual completa, pero esto puede retrasarse.Problemas oculares. La anemia de células falciformes puede dañar los vasos sanguíneos del ojo, con mayor frecuencia en la retina. Los vasos sanguíneos de la retina pueden crecer demasiado, bloquearse o sangrar. Esto puede hacer que la retina se desprenda, lo que significa que se levanta o se sale de la posición normal. Estos problemas pueden provocar una pérdida de la visión.
  • Cálculos biliares. Cuando los glóbulos rojos se descomponen, en un proceso llamado hemólisis, liberan hemoglobina. Luego, la hemoglobina se descompone en una sustancia llamada bilirrubina. La bilirrubina puede formar cálculos, llamados cálculos biliares, que se atascan en la vesícula biliar. La vesícula biliar es un pequeño órgano con forma de saco debajo del hígado que ayuda con la digestión.
  • Problemas cardíacos, incluida la enfermedad coronaria y la hipertensión pulmonar. Las transfusiones de sangre frecuentes también pueden causar daño cardíaco por sobrecarga de hierro.
  • Infecciones. El bazo es importante para la protección contra determinados tipos de infecciones. Si tiene anemia de células falciformes, un bazo dañado aumenta el riesgo de determinadas infecciones, como clamidia, haemophilus influenzae tipo B, salmonela y estafilococo.
  • Problemas en las articulaciones. La presencia de células falciformes en los huesos de la cadera y, con menos frecuencia, en las articulaciones de los hombros, las rodillas y los tobillos, puede disminuir el flujo de oxígeno y provocar una afección llamada necrosis avascular o aséptica, que daña gravemente las articulaciones. Algunos síntomas son dolor y problemas para caminar y mover las articulaciones. Con el tiempo, es posible que necesite analgésicos, cirugía o reemplazo de las articulaciones.
  • Problemas en los riñones. La anemia de células falciformes puede provocar que los riñones tengan problemas para producir una orina tan concentrada como debería ser. Esto puede provocar la necesidad de orinar con frecuencia y enuresis nocturna o micción incontrolada durante la noche. Esto a menudo comienza en la niñez.
  • Úlceras en las piernas. Las úlceras que se ven en pacientes con anemia de  células falciformes son llagas que por lo general comienzan siendo pequeñas y luego aumentan de tamaño. Algunas úlceras sanan rápidamente, pero otras pueden no sanar y durar un largo tiempo. Algunas úlceras reaparecen después de cicatrizarse. Las personas que tienen anemia de células falciformes generalmente no desarrollan úlceras hasta después de los 10 años.
  • Problemas de hígado. La colestasis intrahepática por células falciformes es un tipo de daño hepático poco común pero grave que se produce cuando los glóbulos rojos falciformes bloquean los vasos sanguíneos del hígado. Este bloqueo impide que llegue oxígeno suficiente al tejido del hígado. Estos episodios suelen ser repentinos y pueden producirse más de una vez. Los niños a menudo se recuperan, pero algunos adultos pueden tener problemas crónicos que conducen a una insuficiencia hepática. Las transfusiones de sangre frecuentes pueden provocar daño hepático por sobrecarga de hierro.
  • Problemas en el embarazo. El embarazo puede aumentar el riesgo de hipertensión arterial y coágulos de sangre en mujeres que padecen anemia de células falciformes. La afección también aumenta el riesgo de aborto espontáneo, parto prematuro y bebés con bajo peso al nacer. Obtenga más información sobre el embarazo y la anemia de células falciformes.
  • Priapismo. El priapismo es una erección dolorosa no deseada a veces prolongada. Esto sucede cuando las células falciformes bloquean el flujo de sangre que sale de un pene erecto. Con el tiempo, el priapismo puede provocar daños permanentes en el pene e impotencia. Un priapismo que dura más de 4 horas es una emergencia médica.
  • Anemia grave. Las personas que padecen anemia de células falciformes suelen tener anemia leve a moderada. Sin embargo, a veces, pueden tener una anemia grave potencialmente mortal.
  • Derrame cerebral o lesión cerebral silenciosa. Una lesión cerebral silenciosa, también llamado derrame cerebral silencioso, es un daño en el cerebro sin mostrar signos externos de un derrame cerebral. Esta lesión es común y se puede detectar en las imágenes de resonancia magnética (IRM). La lesión cerebral silenciosa puede provocar dificultades para aprender, tomar decisiones o mantener un trabajo.

Complicaciones de anemia grave

Las personas que tienen anemia de células falciformes también suelen tener anemia leve a moderada. A veces, sin embargo, pueden tener anemia grave. Una anemia grave puede ser potencialmente mortal. Una anemia grave en un recién nacido o un niño con anemia de células falciformes puede ser el resultado de lo siguiente:

  • Crisis aplásica. La crisis aplásica generalmente es causada por una infección por parvovirus B19, también llamada quinta enfermedad o eritema infeccioso. El parvovirus B19 es una infección muy común, pero cuando se tiene anemia de células falciformes, puede provocar que la médula ósea deje de producir nuevos glóbulos rojos durante un tiempo, lo que conduce a una anemia grave.
  • Crisis de secuestro esplénico. El bazo filtra la sangre y destruye los glóbulos viejos. En las personas que tienen anemia de células falciformes, los glóbulos rojos pueden quedar atrapados en el bazo y provocar que este crezca rápidamente más de lo normal. Con los glóbulos rojos atrapados en el bazo, hay menos disponibles para circular en la sangre, y esto puede provocar una anemia grave. Un bazo grande también puede causar dolor en el lado izquierdo del abdomen. Un padre generalmente puede sentir que el bazo es más grande de lo normal en el abdomen de su hijo.

La crisis aplásica y la crisis de secuestro esplénico se producen con mayor frecuencia en recién nacidos y en niños con anemia de células falciformes. Los adultos que padecen anemia de células falciformes también pueden experimentar episodios de anemia grave, pero estos suelen tener otras causas. Es posible que los bebés y los recién nacidos que tienen anemia grave no quieran comer y parezcan muy débiles.