Presión arterial alta Embarazo y presión arterial alta

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En los Estados Unidos, la presión arterial alta afecta a 1 de cada 12 a 17 embarazos. Es importante monitorear la presión arterial antes del embarazo, durante el embarazo y después. La presión arterial alta durante el embarazo puede dañar los riñones u otros órganos de la madre y puede adelantar el parto (denominado parto prematuro) y peso bajo al nacer.

Si está pensando en tener un bebé y tiene presión arterial alta, hable con el proveedor de atención médica para que pueda tomar medidas para disminuir o controlar la presión arterial alta antes del embarazo y durante este.

Algunos medicamentos que se usan para tratar la presión arterial alta no se recomiendan durante el embarazo. Si está tomando medicamentos para disminuir o controlar la presión arterial alta, hable con su proveedor sobre las opciones para controlar la presión arterial alta de manera segura mientras esté embarazada.

Si tiene presión arterial alta antes del embarazo, deberá controlarla durante el embarazo y después.

Además, algunas mujeres que tienen una presión arterial saludable desarrollan presión arterial alta durante el embarazo o después.

• La hipertensión gestacional es una presión arterial superior o igual a 140/90 que aparece durante el embarazo. Por lo general se diagnostica después de 20 semanas de embarazo o cerca del parto.
• La preeclampsia es una combinación de presión arterial alta durante el embarazo y signos de que los órganos no están funcionando bien, por ejemplo, porque se detecta un alto contenido de proteínas en la orina. Eso puede llevar a convulsiones potencialmente mortales o coma, una afección que se conoce como eclampsia. Las mujeres que tuvieron preeclampsia tienen un mayor riesgo de desarrollar presión arterial alta y enfermedad cardíaca más adelante.
• El síndrome de HELLP es un tipo más grave de preeclampsia o eclampsia.
• Los trastornos de presión arterial alta pueden continuar después del nacimiento del bebé. Algunas mujeres pueden seguir teniendo problemas de presión arterial alta, incluidos preeclampsia, eclampsia o síndrome de HELLP, después del nacimiento del bebé, o bien la presión arterial alta puede empeorar.
• También puede ocurrir un aumento súbito de la presión arterial (más de 160/110 mm HG ) durante el embarazo o después del nacimiento del bebé. Eso constituye una emergencia médica.

Esté atenta a los signos de advertencia de un problema cardíaco, incluida la presión arterial alta, durante el embarazo y después. Algunos signos de advertencia son el dolor de cabeza que empeora, cansancio abrumador, mareos, dificultad para respirar, dolor en el pecho o el abdomen, hinchazón o náuseas. Si siente que algo no anda bien, busque atención médica de inmediato.

Como parte de la atención prenatal habitual, el proveedor de atención médica medirá la presión arterial en cada visita. Vea más información sobre cómo prepararse para una prueba de presión arterial.

Si tiene presión arterial alta, usted y su bebé serán monitoreados atentamente para que usted pueda recibir atención especial a fin de reducir la probabilidad de complicaciones. Tal vez deba hacer lo siguiente:

• medir su presión arterial en el hogar. Visite Cómo medir la presión arterial (en inglés) para ver más información;
• llevar un registro de cuántas veces por día siente al bebé patear;
• limitar su actividad física. Hable con su proveedor de atención médica acerca de cuál es el nivel de actividad física indicado para usted;
• tomar medicamentos para controlar la presión arterial. En ese caso, hable con su proveedor acerca de los medicamentos que son seguros para el bebé. Esos medicamentos pueden incluir bloqueadores de los canales de calcio (nifedipino) tomados por boca o betabloqueantes (labetalol) o vasodilatadores (hidralazina) administrados por inyección intravenosa (i.v.);
• tomar aspirina durante el segundo trimestre si tiene riesgo de preeclampsia y el proveedor le recomienda tomar aspirina;
• visitar al proveedor con más frecuencia para monitorear su estado y la tasa de crecimiento y frecuencia cardíaca del bebé. El proveedor puede indicar análisis de sangre y orina para revisar cómo están funcionando sus órganos, y eso puede ayudar a detectar preeclampsia.

Si a su proveedor de atención médica le preocupa su salud o la de su bebé, tal vez le recomiende tener al bebé antes de que se cumplan 39 semanas. Es posible que deba permanecer en el hospital para recibir medicamentos que ayudarán a que los pulmones del bebé se desarrollen más rápido y para que la monitoreen antes de tener al bebé y después.