Endoprótesis (stents) ¿Cuándo se necesita una endoprótesis?

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Su proveedor de atención médica podría recomendarle una endoprótesis, o stent, para sostener la pared estrechada o debilitada de una arteria o de una vía respiratoria. Su proveedor discutirá los riesgos y beneficios de un stent con usted. Varias afecciones pueden requerir el uso de una endoprótesis.

Su proveedor de atención médica podría usar una endoprótesis recubierta para tratar un aneurisma o una  disección  de la aorta, la principal arteria que transporta sangre rica en oxígeno al resto del cuerpo. Algunas afecciones médicas pueden dañar las paredes de la aorta. Cuando las paredes están débiles, la fuerza que produce la sangre al fluir puede provocar un aneurisma, un bulto en forma de globo, en la aorta. El stent recubierto sostiene el área débil de la aorta y ayuda a evitar que el aneurisma estalle o rompa la pared de la arteria (disección). Las endoprótesis recubiertas también pueden ayudar a controlar el flujo sanguíneo después de una lesión y evitar que la sangre se escape del vaso sanguíneo al cuerpo.

Las endoprótesis vasculares se utilizan a menudo para abrir estrechamientos en las arterias coronarias. En la cardiopatía coronaria, las arterias no pueden transportar suficiente sangre rica en oxígeno hasta el corazón. Al reducirse el flujo de sangre al corazón, la falta de oxígeno puede provocar dolor de pecho y dañar el músculo cardíaco por un ataque al corazón.

Para comprender las causas de la cardiopatía coronaria, es importante saber cómo funciona el corazón.

Las arterias  arterias carótidas  son arterias del cuello que transportan sangre rica en oxígeno hasta el cerebro. La acumulación de  placa   en las arterias carótidas puede provocar enfermedad de las arterias carótidas y aumentar el riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular. Colocar una endoprótesis en una arteria carótida estrechada puede ayudar a mantener la arteria abierta y restablecer el flujo sanguíneo normal al cerebro.

En la arteriopatía periférica, la placa se acumula en las arterias que llevan sangre a las piernas, los brazos o el abdomen. Las endoprótesis pueden ayudar a corregir estrechamientos en las arterias, aliviar los síntomas y prevenir futuros problemas de salud debidos a un flujo de sangre reducido.

Los stent pueden ayudar a corregir estrechamientos en las vías respiratorias de los pulmones. A diferencia de su uso en las arterias, la colocación de una endoprótesis en las vías respiratorias suele ser una solución temporal antes de una cirugía u otros tratamientos más permanentes. Las endoprótesis de silicona son fáciles de mover y de extraer de las vías respiratorias y pueden permanecer colocadas durante varios años. Las endoprótesis metálicas, por otro lado, son más difíciles de extraer cuanto más tiempo permanecen en las vías respiratorias, por lo que su uso es menos común.

Hay varias razones para necesitar un stent en las vías respiratorias.

• Algunos problemas de nacimiento, o afecciones congénitas, pueden hacer que necesite una endoprótesis en las vías respiratorias.
• Infecciones o afecciones como la sarcoidosis pueden provocar una hinchazón que oprime las vías respiratorias. Cualquier cosa que presione sobre los pulmones puede provocar un estrechamiento o una obstrucción en las vías respiratorias.
• Pueden producirse lesiones en las vías respiratorias durante la intubación, en la que se guía un tubo hasta los pulmones para ayudarle a respirar. El daño causado por algunos tratamientos pulmonares también puede provocar el estrechamiento de las vías respiratorias, como por una traqueostomía o si se forma un agujero en la zona de la sutura después de un trasplante de pulmón.
• Los tumores pueden bloquear las vías respiratorias. A veces los tratamientos de cáncer, como la radiación o la quimioterapia, también pueden dañar las vías respiratorias.

Para comprender las vías respiratorias, es importante saber más sobre cómo funcionan los pulmones.

Su proveedor de atención médica considerará su salud, hablará con usted sobre los riesgos y lo ayudará a tomar una decisión.

Es posible que una endoprótesis arterial no sea recomendable si:

• Su afección es leve. Su proveedor podría monitorear su afección, iniciar su tratamiento con medicamentos y recomendarle adoptar cambios cardiosaludables en su estilo de vida.
• No puede tomar medicamentos antiagregantes durante el tiempo necesario después de la colocación de la endoprótesis. Los antiagregantes plaquetarios previenen la formación de peligrosos coágulos de sangre en el interior de la endoprótesis.
• Tiene otras afecciones médicas, como estrechamiento en múltiples arterias coronarias, enfermedad renal de larga duración o diabetes. En su lugar, es posible que su proveedor le recomiende una cirugía de revascularización coronaria.
• Tiene un alto riesgo de sufrir complicaciones. La edad u otros factores de riesgo pueden llevar a su proveedor a recomendarle un tratamiento diferente en lugar de una endoprótesis para una arteria carótida, especialmente si es mayor de 70 años o tiene un alto riesgo de sufrir un accidente cerebrovascular. Las endoprótesis recubiertas pueden ser más riesgosas para las personas mayores o con afecciones como insuficiencia cardíaca (en inglés) o renal.

Es posible que una endoprótesis en las vías respiratorias no sea recomendable si:

• No puede recibir anestesia ni estar sedado.
• Necesita otras intervenciones en el futuro, como terapia con láser, que puedan romper o quemar la endoprótesis. Una endoprótesis colocada en las vías respiratorias también puede suponer un obstáculo si necesita cirugía pulmonar por otros motivos.